domingo, 5 de julio de 2009

La inspiración y yo nos odiamos a muerte.


La inspiración no existe. O al menos llevan diciendo muchos de los grandes escritores y de los profesionales de las diversas técnicas narrativas. Sólo a través de un arduo proceso de investigación y comparación de datos se puede llegar a tener una base seria para lo que tiene que ser todo libro, guión, proyecto o los que sea. Bueno, eso en parte es verdad, en parte falso. Necesitamos una idea que dispare el proceso creativo y esa a veces llega en el momento menos esperado.

Yo soy muy especial a la hora de ponerme a escribir. Me pasa como a Billy Cristal en la memorable "Tira a mamá del tren". Me puedo pasar mil horas delante del teclado o con mi libreta y la única frase que lograré escribir será "La noche era...". Parece una tontería pero es cierto. He perdido días enteros y horas de sueño en darle vueltas a mil ideas para nada. Me obsesiono tanto que me convierto en mi propios verdugo. En cambio puedo estar haciendo cualquier otra tarea (ver la tele, leer, jugar a la consola, pasear...) y de repente, como Vickie el Vikingo, frotarme la naríz, chasquear los dedos y despertar de mi letargo. Es en ese momento cuando cojo lo primero que tengo a mano y empiezo a anotar como un poseso frases inteligibles las cuales yo soy el único que les puede dar sentido. Es como un trance, cuando mi musa baja a la tierra, me suelta dos tollinas y me grita a pleno pulmón "¡Escribe de una vez, gilipollas!".

Y eso es lo que me ha pasado esta misma tarde. Olvidé mencionar que esta última semana estaba de nuevo en un blackout literario y estaba empezando a acordarme de todo el santoral, pero se me ha iluminado el cabezón y parece que la neurona vuelve a respirar, al menos de momento. Así que una vez más y para no perder la costumbre he apartado todo lo que tenía entre manos y he recuperado otro de mis proyectos, para pasarlo de nuevo por la licuadora literaria y transformarlo (y será ya la tercera vez) en algo distinto. Y esta vez será.... sorpresa.

Me pregunto si alguna vez voy a poder terminar algo a tiempo. Por lo menos se en que voy a estar ocupado las proximas semanas. Total, ya duermo poco por el maldito calor, así tendré algo para matar el tiempo.

2 comentarios:

B dijo...

Enhorabuena por ir recuperando la inspiración...ahora lo fundamental es que no decaiga, jajaja

Isi dijo...

uys...pues yo creo que no deberías darte un plazo...porque sino, el blackout literario será cada vez peor, no????.

No desesperes, eso les pasa a todos los grandes escritores y si te pasa es porque quieres que salga una novela perfecta y así será...estoy segurísima de ello.

Un besote con inspiración ¿divina? ;)