El mío es más grande que el tuyo

Hoy en día todo el mundo farda de ipod komomolo, que si es muy pequeño y cuantas canciones caben en él, que si mira que base de mil euros le he comprado... Yo hace seis años que uso el mismo reproductor mp3. Mi querido hermano y yo para nuestros cumpleaños respectivos tenemos la malsana costumbre de intentar sorprender al otro con el regalo mas tecnológicamente friki del momento. Hacé seis años apareció con un Creative Zen Xtra de 60 gigas, que le costó un riñón y parte del otro. Por aquel entonces los simples mortales íbamos con reproductores que tenían una capacidad de 256 megas, o si teníamos suerte, con reproductores que leían tarjetas SD (y podíamos ponerle una de 512 gastándonos la pasta). Así que imaginad la cara que se me puso al ver semejante monstruo. Yo que no soy muy amigo de los trastos pequeños (para no perderlos más que nada) quedé encantado. El Xtra pesaba y abultaba lo mismo que un walkman y en vez de usar pilas, llevaba una batería como la de los móviles, que se podia cargar por corriente o con un cable como el que años después usaría la PSP para carga usb (y el alimentador es del mismo voltaje que el de la consola). Además, el cacharro en cuestión llevaba unos drivers que permitían usarlo como disco duro externo para el ordenador, con lo que podía llevar infinidad de cosas encima. Obviamente con él fui el rey entre todos los colegas, y en más de una ocasión me salvó cuando necesitaba transportar urgentemente algo.

Aún lo sigo usando y aunque hasta los reproductorés clónicos que venden en los bazares chinos tienen más opciones que mi Creative, sigo disfrutando de él cómo el primer dia. Este año pasado me ocurrió una anecdota curiosa. Bajando del autobus después de salir de la oficina me crucé con un tio que llevaba el mismo modelo que yo. Nos quedamos mirando como memos durante un segundo, el tipo me sonrie y me dice: "Tú si que sabes" antes de subirse a un bus. Es bueno saber que no soy el único dinosaurio tecnológico de la ciudad.